Casi
todos los analistas y la inmensa mayoría de los ciudadanos (excepto parte de la
parroquia “sociata”) han considerado que la actitud y el comportamiento de “snchz”
(¡pronúnciese como un estornudo!, al estilo de Federico) fue el propio de un auténtico
macarra pandillero y maleducado; una cosa es interrumpir educadamente en un
debate a dos, y otra no permitir al otro que se exprese, hablando (rezongando) siempre
encima, y no dejarle terminar ni una frase … y lo que ya no tiene nombre es
saltarse las reglas del debate, despreciar los temas que introducía el moderador
(previamente pactados entre las partes), pero lo que es inadmisible es insultar
y faltar al respeto al contrincante, y poner en duda su honorabilidad personal.
“Snchz” demostró que no tiene talla, ni personal, ni intelectual,
ni política, ¡vamos, un piernas!. Sería una desgracia para España que este
espantajo fuera presidente del gobierno de la nación. Solo habría un algo a
valorar: que los “sociatas” tienen
gente en plantilla que hace grande al cantamañanas que es ZP.
Por su parte, Rajoy se quedó corto, se pasó de educado ... al recibir de primeras el gravísimo insulto debería haberse plantado, haberse puesto de pie, y haberle dicho a “snchz” y a Campo Vidal que, o “snchz” retiraba su insulto, o que en ese mismo momento terminaba el debate .... ¡y a ver qué hubiera pasado!.
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