La fraudulenta “unidad” anti-eta en beneficio de Zapatero y de la negociación con Eta

Esta madrugada hemos tenido otra bomba en los Juzgados de la región: fallaron las de Guecho pero ha funcionado la de Sestao.
Ya hemos escrito antes sobre la unidad de todos los nacionalistas vascos contra la Administración de Justicia, pero no está demás recordar como hace aún pocos años un alto cargo de la Consejería autonómica de Justicia (en las zarpas, digo, en las manos de EA), durante una manifestación en San Sebastián, precintó con cadenas la puerta principal de los Juzgados de la ciudad; todos recordamos también al viejo Javier Arzalluz, jubileta pensionista, paraguas en ristre, a modo de garrota, que no de batuta, dirigiendo a las minimultitutes nacionalistas (la mayoría recién apeados de su coche oficial) en las puertas del Palacio de Justicia de Bilbao mientras declaraba el Lendacary Ibarreche; los atentados y asesinatos de la banda criminal nacionalista vienen de antiguo: han asesinado a multitud de jueces y fiscales, aunque sólo nos acordemos de Tomás y Valiente, Portero, Tagle y Lidón.
La deslegitimación permanente del Lendacary Ibarreche y las amenazas de la banda criminal nacionalista no podían sino converger: en esas estamos, y frente a esta situación no podemos decir sino:
¡Eta culpable, Ibarreche responsable!.
Aún con todo, lo mejor es la parida que hemos escuchado esta mañana a Llamazares (el chico de Madrazo en Madril) en la radio, comentando la bomba de Sestao, ha clamado por la “unidad de los demócratas” contra Eta. La pregunta que nos hacemos es: ¿unidad en qué o para qué?, y la que le hacemos a él es otra: ¿qué tal esa unidad para cerrar las puertas a la negociación y a favor de una lucha sin cuartel contra la banda criminal nacionalista vasca?.
Y, ya puestos a preguntar, va la última, es para el P.P.: ¿os da tiempo a plantear al Congreso de los Diputados por quinta vez la anulación de la resolución de 17 de mayo de 2005 a favor de la negociación con los criminales etarras?.